Fractura de cúbito y radio en cachorro Toy
Las fracturas de cubito y radio son bastante frecuentes en la clínica de pequeños animales, y no son necesariamente fractura complicadas, pero si se trata de animales en crecimiento y de razas muy pequeñas entonces los porcentajes de complicaciones se incrementan notablemente, debido a varios factores tales como el pequeño tamaño de los huesos en estos animales ( casi siempre de unos pocos milímetros) pero también influye el daño a los tejidos blandos que puede provocar una necrosis vascular, e igualmente influye la facilidad de estos animales para caminar en tres extremidades, de forma que en ocasiones pueden no apoyar el miembro operado retrasando excesivamente la cicatrización y recuperación del mismo.
En este caso presentamos una fractura de cubito y radio en un cachorro Pomerania de 5 meses de edad y un peso de 1,5 kg que se había fracturado la extremidad al saltar desde una altura inferior a un metro, que puede parecer muy poco, pero en un cachorro tan joven y de una raza toy es una altura excesiva para el diámetro y resistencia de sus huesos.
Veamos la primera imagen radiográfica:
Se trata de una fractura metafisaria transversa de cúbito y radio en un animal joven que todavía tiene activas las placas de crecimiento, y de un tamaño muy pequeño. Entre las distintas opciones de tratamiento para una fractura de cubito y radio se podría plantear la colocación de un fijador externo, probablemente con pésimos resultados en este tipo de pacientes, por ello planteamos la colocación de una placa de ostesíntesis, para lograr una buena coaptación de los fragmentos y una rápida recuperación antes de que el paciente perdiese la poca masa muscular que tiene, y tras la autorización de los dueños se le puso al paciente una placa doble de sólo 0,9 mm de grosor, y los tornillos tienen únicamente 8 mm de longitud, a pesar de los cual atraviesan sobradamente el radio y agarran en la segunda cortical.
Veamos una vista intraoperatoria
*Fijaos en el tamaño del antebrazo del paciente en comparación con mi dedo…
Y ahora vemos la imagen radiográfica del post operatorio inmediato, donde se aprecia una buena reducción y alineación de los fragmentos y espacio suficiente entre la placa y la línea de crecimiento.
Aparentemente parece que hay mucho espacio, pero debe tenerse en cuenta la magnificación de la imagen digital, que nos permite apreciar los detalles a una escala mucho mayor del tamaño real del paciente.
Habitualmente todas las cirugías de trauma están condicionadas por un buen control postoperatorio y una fisioterapia adecuada, lo cual es todavía más importante en este tipo de pacientes, donde es imprescindible una restricción parcial del ejercicio, y la movilización pasiva del miembro varias veces cada día, para reducir el edema, favorecer el aporte sanguíneo a la musculatura local, incrementar el rango de movilidad articular, favorecer el inicio de la fase de carga y acelerar la recuperación funcional.
El paciente comenzó a apoyar la extremidad al segundo día, luego cuando llevaba una semana ya intentaba correr por el pasillo de la casa y aunque se le estuvo controlando todo lo posible cada vez era más difícil contenerlo y a los 25 días se le hizo la radiografía de control, que mostramos seguidamente:
Como puede apreciarse, la fractura ya había consolidado, en un tiempo récord, es una ventaja de trabajar con cachorros y a partir de ese momento el animal recuperó su actividad normal sin complicaciones posteriores.
