Fractura de físis distal del fémur
En esta
entrada presento el caso de un cachorro de Chihuahua de 7 meses y 2,8 kg que se
cayó del balcón de la casa de sus dueños y presenta una cojera sin apoyo de su
extremidad posterior izquierda.
Ha sido
atendido por otros compañeros que ya han comprobado que no existen daños
vitales y una vez hecha la primera exploración y haber descartado patologías
que puedan comprometer su vida, comenzamos el estudio radiográfico.
En primer
lugar se hace la radiografía medio lateral del tercio posterior y se obtiene la
siguiente imagen:
Se aprecia
una fractura a nivel de la fisis distal del fémur, muy típica de cachorros en
crecimiento, pero siempre está indicado hacer las dos vistas radiográficas, y
realizamos también una radiografía en otra posición, para obtener la siguiente
imagen:
Esta imagen
nos permite apreciar mucho mejor la fractura transversa a nivel de la fisis
distal, con importante desplazamiento de los fragmentos, pero además si nos
fijamos un poco más, hay una fractura intercondílea que no se apreciaba en la
imagen anterior y que nos complica un poco la reducción de la fractura.
La forma
clásica de resolver las fracturas transversas de fisis distal del fémur es
mediante dos clavos de Rush o dos agujas de Kirschner cruzadas, y si el
fragmento distal es un poco más grande, puede ponerse una placa curvada de
fémur distal, pero en este caso tenemos una fractura en “T” y es preciso fijar
los cóndilos del fémur entre sí y también con el fragmento proximal.
Realizamos
un abordaje lateral a la rodilla y tratamos de identificar los distintos
fragmentos, obteniendo la siguiente imagen que confirma la fractura intercondílea:
A partir de
ese momento hay que intentar reducir la fractura intercondílea, tratando de
lograr la máxima congruencia en el surco de la rótula, que es el punto crítico
en esta cirugía, y luego uniremos los cóndilos al fémur.
En este caso, puesto que se trataba de un
cachorro se realizaron todas las fijaciones con agujas de Kirschner, y una vez
finalizada la cirugía se le realizaron las siguientes radiografías de control:
En esta
vista medio lateral se aprecia una reducción bastante buena, la rótula está en
su posición anatómica correcta y aunque hay un defecto óseo derivado de la
fractura la funcionalidad intra operatoria de la extremidad era buena y
permitía esperar una buena recuperación del paciente.
Además se presenta
la vista antero posterior, donde se aprecia mejor la colocación de las agujas:
En esta
imagen se aprecian mejor las dos agujas intercondilares y también las otras dos
agujas cruzadas que fijan el fragmento distal, en una resolución tradicional de
este tipo de fracturas.
Como en
todas las fracturas intraarticulares se han seguido tres principios básicos,
resolución anatómica lo más perfecta posible, fijación interna rígida y
movilización precoz de la extremidad para no perder ni la masa muscular ni el
rango articular.
Por lo tanto lo que queda ahora es hacer movilización pasiva
varias veces al día para que la articulación cicatrice en movimiento, y no se pierda
rango articular. Puesto que el paciente todavía es un cachorro, la recuperación
será rápida y el pronóstico debe ser
favorable.