domingo, 18 de noviembre de 2012

Avulsión cresta tibial


Avulsión cresta tibial

El caso que presento en ésta entrada es referente a un cachorro de Yorkshire que estaba en el asiento del coche del dueño y al saltar dio un  chillido y empezó a cojear de su extremidad posterior izquierda. Al llegar a la clínica se le hace una exploración general, se comprueba donde está la zona lesionada y tras la primera inspección se realizan radiografías de control.
Comenzamos por la vista anteroposterior:

avulsión de cresta tibial, vista ventrodorsal



Aunque la calidad no sea perfecta, es suficiente para comprobar que las caderas no presentan alteraciones patológicas,  pero sobre la tibia  proximal hay una “extraña mancha blanca” que debemos identificar, y para ello ayudará mucho la vista mediolateral de la rodilla. Veamos dicha radiografía:

avulsión de cresta tibial, vista lateral


Evidentemente tras ésta imagen ya podemos afirmar que el paciente sufre una avulsión de la cresta tibial, que necesita una reparación quirúrgica.
La solución de éste caso pasa por reponer la cresta tibial en su sitio y fijarla con unas agujas de kischner, pero además para contrarrestar el tendón del cuádriceps que puede volver a arrancar el fragmento se suele poner un cerclaje en 8 con acero quirúrgico, aunque debemos considerar que el cerclaje evitará el crecimiento del hueso, y  tal vez sea suficiente con una sutura, que creará una sujeción menos rígida.

Luego sólo nos queda hacer las radiografías de control, comenzamos por la vista anteroposterior:

resolución avulsión cresta tibial, vista ventrodorsal


Y para terminar vemos la vista mediolateral, donde podemos comprobar el correcto posicionamiento del fragmento, que muy pronto permitirá al paciente volver a caminar con normalidad.

resolución avulsión cresta tibial, vista lateral


miércoles, 7 de noviembre de 2012

Fractura en cara medial del epicóndilo del húmero en gato


Fractura en cara medial del epicóndilo del húmero en gato

En esta nueva entrada presento el caso de un gatito de poco más de cuatro meses que cayó desde una ventana y presentaba una cojera sin apoyo de su extremidad anterior izquierda.
Como siempre comento, ante un caso así lo primero es comprobar que no hay daños importantes en sistema nervioso, comprobar que los reflejos son normales, que la respiración también lo es, no hay neumotórax ni costillas rotas, no hay signos de hemorragia interna, el paladar está bien,  la vejiga parece que no está rota, y luego ya nos concentraremos en la cojera, que aunque puede ser grave, no compromete la vida, a diferencia de otros procesos que sí podrían comprometerla y que previamente hemos descartado.
Una vez comenzamos la exploración traumatológica, al palpar el codo se percibe un chasquido y el siguiente paso es hacer las radiografías de control. Empezamos con una vista mediolateral:

fractura de codo en gato, vista mediolateral

Y completamos la exploración radiográfica con la vista anteroposterior :

fractura de codo en gato, vista anteroposterior


En este caso es evidente que hay una fractura en la cara medial del cóndilo del húmero,  Salter Harris tipo IV, lo cual es curioso pues habitualmente se suele fracturar con más frecuencia el epicóndilo lateral.  
Además en gatos  hay una complicación añadida pues el nervio mediano y la arteria braquial pasan a través del agujero supracondilar del húmero y debemos ser muy cuidadosos en la cirugía para no pinzar estas importantes estructuras.

Generalmente las fracturas condilares del húmero suelen resolverse con un tornillo transcondilar, una aguja antirrotacional paralela al tornillo  y una ó dos agujas en el extremo proximal del fragmento para lograr la máxima fijación y evitar cualquier  posible rotación o desplazamiento, pero en éste caso, puesto que se trataba de un paciente muy  joven, de poco peso y con un hueso muy blando ( esponjoso)  fue suficiente con una aguja de Kischner transcondilar y un par de pequeñas agujas cruzadas en el segmento proximal para lograr una estabilización adecuada.

Veamos las radiografías de control post- operatorio, en primer lugar la toma mediolateral:

resolución fractura de codo en gato, vista mediolateral

Y vemos también la imagen radiográfica anteroposterior:


resolución fractura de codo en gato, vista anteroposterior




La evolución fue muy rápida como cabría esperar en un joven gatito y en las siguientes radiografías de seguimiento al mes ya se aprecia una buena consolidación. 
En primer lugar comprobamos la imagen mediolateral, y  parece que está uniendo bien:

fractura de codo en gato, vista mediolateral con las agujas

Y en la vista anteroposterior confirmamos que ciertamente la evolución ha sido buena y el paciente presenta una consolidación adecuada de la fractura.

fractura de codo en gato, vista anteroposterior con las agujas


Puesto que se trata de un paciente muy joven,  es conveniente extraer  las agujas de Kischner en un futuro próximo, aunque no interfieran ya en ninguna línea de crecimiento y entonces el paciente estará finalmente recuperado.