domingo, 19 de enero de 2020

Fractura de mandíbula



Fractura de mandíbula



Aunque en este blog ya se han publicado otras fracturas de mandíbula, en la práctica diaria hay casos que se repiten, y del mismo modo, también aquí repetiremos algunos casos, simplemente para reflejar el trabajo diario de la clínica, aunque en alguna ocasión, puesto que hay varias soluciones posibles la resolución será diferente, lo cual es también una forma de enriquecer la formación clínica.

En esta ocasión tenemos un Bichón Maltés de 2,5 kg, que ha sido atropellado y presenta una fractura de mandíbula. Veamos las radiografías previas:



fractura de mandíbula canino



Generalmente, en esta vista, aunque se sospecha de fractura, no pueden apreciarse todos los detalles particulares, y suelen ser necesarias vistas oblicuas de las zonas donde se palpa desplazamiento para comprender mejor las fracturas del paciente.



fractura de mandíbula canino

fractura de mandíbula canino

fractura de sínfisis mandíbular canino






El paciente presenta una fractura de la rama mandibular derecha, junto con una fractura de la sínfisis mandibular. En la planificación operatoria, debemos considerar que aunque la fractura de la sínfisis mandibular es fácilmente solucionable, tenemos también una fractura de la rama mandibular bastante caudal, en un paciente muy pequeño y con muy poco hueso para anclar los implantes porque la mandíbula se estrecha mucho caudalmente.


Probablemente los tornillos normales no puedan sujetar lo suficiente la mandíbula a ese nivel, y tampoco lo lograríamos con fijadores externos, por lo tanto, fue necesario recurrir a tornillos bloqueados, en una mini placa de titanio.


Veamos las radiografías del control post operatorio:


cerclaje sínfisis mandibular perro



tornillos de bloqueo mandíbula canino


La reducción anatómica es muy buena, ambas mandíbulas encajan perfectamente, y la fijación que aportan los mini implantes de bloqueo es tan buena que el paciente puede utilizar la boca desde el principio, aunque recomendamos que al menos durante las primeras tres semanas la comida sea húmeda y que se eviten los juguetes que el perro pueda morder.